Este domingo, en el Hípico de Federación, se vivió un trágico episodio durante una carrera cuadrera, cuando un caballo se desplomó tras cruzar la meta, sin poder levantarse nuevamente. Según los presentes, el animal habría sufrido un paro cardíaco debido a un esfuerzo extremo.
El hecho ha generado preocupación entre los vecinos, quienes consideran que este tipo de muertes no son naturales, y han comenzado a surgir sospechas de que los caballos podrían ser sometidos al consumo de drogas ilegales para mejorar su rendimiento en las competencias. «Ningún animal se muere de muerte natural en estas circunstancias», afirmó al sitio informativo 7Paginas, un conocedor local de las carreras cuadreras.
A pesar de que este tipo de carreras no están prohibidas y son legales, los eventos están rodeados de irregularidades. Uno de los puntos más cuestionados es la falta de un médico veterinario en estas jornadas, lo que deja a los animales sin atención adecuada ante emergencias como la ocurrida el domingo. Además, hasta el momento no se ha emitido un informe oficial que detalle las causas de la muerte del caballo.
Otro aspecto que ha llamado la atención es el movimiento de dinero en las carreras. Se apuesta grandes sumas de forma legal en los remates, pero se acusa que ese dinero no tributa al Estado, y podría estar siendo utilizado para el blanqueo de capitales. A esto se suma la presencia de apuestas ilegales, que ocurren frente a la vista del personal policial encargado de la seguridad del evento.
La situación genera un debate sobre el maltrato animal y la necesidad de regulación en estas actividades. Vecinos y defensores de los derechos de los animales instan a los ediles de Federación a involucrarse y exigir cambios, como la obligatoriedad de la presencia de un veterinario en las carreras, quien tendría la responsabilidad de garantizar el bienestar de los equinos y evitar que sean víctimas de abusos.